Litoral de Mallorca

Cala Agulla, Cala Moltó y la Platja de ses Cavasses

El contacto de las Serres de Llevant con el mar ofrece algunos de los parajes más bellos de Mallorca. No tienen la grandeza y la espectacularidad de los del litoral de la Serra de Tramuntana, pero precisamente esta dimensión más reducida de las montañas levantinas ha permitido un modelaje más intenso y visible, con modestos acantilados, salientes rocosos, puentes de piedra, puntas, calas con pequeñas playas y campos de dunas. El tramo de costa que va de Cala Agulla al Cap des Freu es un ejemplo bastante ilustrativo de ello.

Cala Agulla se localiza en el término de Capdepera y constituye un arenal de unos 600 m de longitud que se extiende entre el promontorio del Cap de Capdepera y la vertiente oriental del Puig des Telègraf (271 m), en cuya cima se halla la Talaia de Son Jaumell, o lo que queda de ella. Por detrás de la playa hay un campo de dunas fijadas por la vegetación, pinos y lentiscos principalmente, que penetra hacia el interior entre 100 y 150 m. Esta playa viene a ser la más extensa de la localidad turística de Cala Rajada, y sus edificaciones asoman por el extremo meridional.

El estrecho saliente rocoso de la Punta des Gulló separa Cala Agulla de Cala Moltó y la denominada Platja de ses Cavasses. Aquí no hay prácticamente arenal y el contacto tierra-mar se resuelve con un escalón que oscila entre los pocos centímetros y los tres metros. Este escalón a pie de montaña es una antigua plataforma de abrasión erosionada por el mar en un momento que su nivel era más alto. De hecho, para comprender la configuración actual del litoral de Mallorca se debe tener en cuenta la oscilación del nivel del mar durante el periodo Cuaternario. En los últimos 5.000 años el nivel del mar ha variado hasta 18 m; las transgresiones marinas lo hicieron subir casi 3 m por encima del nivel actual y las regresiones lo hicieron descender 15 m.

 La arena de Cala Agulla y la que tapiza el fondo marino de Cala Moltó y la Platja de ses Cavasses es una arena blanca y fina que acentúa la transparencia del agua y ofrece a la mirada una gama de tonalizades azules y verdes extraordinaria. El origen de esta arena son las rocas calizas del Jurásico que mayormente forman las elevaciones de las Serres de LLevant.

Más allá de la Platja de ses Cavasses, la vertiente del Puig des Telègraf gana en verticalidad y las pequeñas calas que se dibujan a pie de acantilado, como Na Xoriguer y Na Llòbrega, solo son accesibles por mar, y no será hasta Cala Mesquida, doblado el Cap des Freu, que volveremos a disfrutar de un arenal acogedor, apto para los bañistas.

Si el día es soleado y la mar va llana, el agua de Cala Agulla y de Cala Moltó es irresistible. Tanto Isabel como yo podemos dar fe de ello porque tuvimos que bañarnos en ambas, y a Isabel, tan dada a estar en remojo, me costó Dios y ayuda hacerla salir del agua para regresar a casa.