MAR NEGRA

Un nuevo caso de delito ecológico que ha de resolver el inspector de Medio Ambiente Ricard Muns. En esta ocasión se trata de un vertido de petroleo que provoca una marea negra que afecta los litorales catalán y francés, desde el cabo de Creus hasta Canet Plage, en Perpignan. Todo apunta a que el causante ha sido el petrolero Maleas, pero, extrañamente, la investigación parece desmentirlo una y otra vez. Finalmente, solo con una acción arriesgada se consigue descubrir la verdad.

scribí Mar negra el año 2001 centrándome en un tipo de delito que habíamos comentado con compañeros de Greenpeace de Palma y que nos parecía que valía la pena dar a conocer por su gravedad. En noviembre del 2002, cuando la novela ya estaba en proceso de edición, el vertido del Prestige confirmó las terribles consecuencias que se pueden derivar del naufragio de petroleros. El suceso era lo bastante importante como para que revisase el texto y lo reescribiese a partir de una tragedia que tenia que estar presente en la mente de todos los personajes de la historia y que acentuaba su dramatismo. Porque no hay duda de que ha habido un antes y un después del Prestige en la conciencia medioambiental de los españoles. Ojalá este desastre ecológico haya servido para darnos cuenta de que la naturaleza es nuestra proveedora y que atentar contra ella es atentar contra nosotros mismos.